JOAQUÍN CARBONELL 11/01/2014
–¿Aquagraria es un parque temático?
–Lo definimos como espacio museístico, pero en el fondo es eso, un parque temático, y nosotros lo utilizamos también como espacio de eventos, lo que nos confiere un valor añadido para poder dirigirnos a un mayor público objetivo.
–¿Qué hay allí?
–Es un espacio diseñado para el recuerdo, la emoción y la experiencia. Mostramos la evolución del sector agrícola, incluso la evolución del hombre, a través de la agricultura.
–¿Dónde está?
–Se ubica en Ejea de los Caballeros, en el interior de la ciudad del Agua, las afueras de la ciudad, perfectamente indicado para los visitantes. Y cuesta entrar 2 euros. Y abre de martes a domingo.
–Usted no había nacido cuando existían muchas de estas máquinas.
–Nací en Zaragoza porque mis padres vinieron de jóvenes de Ejea a Zaragoza. Empecé a ir en épocas estivales, luego tuve novia, luego estuve en el equipo de fútbol sala y acabé viviendo allí.
–¿Un joven dirigiendo una cosa tan antigua?
–Yo siempre he defendido que la experiencia no es determinante, pero la capacidad, sí lo es. Recuerdo que fui la persona más joven en el proceso selectivo y fui el último en entrar a hacer la prueba (risas). Recuerdo que los que entrevistaban tenían ya hambre y que era el único varón.
–Lo tenía todo en contra…
–Aparentemente, pero me seleccionaron a mi. Había que presentar un proyecto, y les debió gustar mi propuesta y mis 23 años.
–¿Por qué recomendaría una visita al museo?
–Porque es un viaje único y singular. Es un museo irrepetible que no se encuentra en ninguna parte de España: la mejor colección de maquinaria antigua de España y 3.000 metros dedicados a ello, es única.
–¿Hay un guía?
–El parque cuenta con un programa de visitas guiadas, unos paneles informativos y últimas tecnologías, y contamos con presencia en varias redes sociales. Tratamos de personalizar las visitas: a todos los visitantes se les hace una introducción a lo que van a visitar, e incluso existe la posibilidad de avisar antes para preparar una visita especial.
–¿De dónde proceden las piezas?
–De todo el mundo. Es un museo universal. Se recorren todas las etapas de la evolución de la maquinaria agrícola, desde la mano humana hasta la máquina de vapor.
